Y de un blog os traigo el texto que viene a continuación:
Violencia
Lo siento mucho, pero no voy a condenar los pasados incidentes en Barcelona. No pienso condenar la violencia surgida de la rabia y la indignación. Quizá esta esté desaprovechada. Quizá no solucione gran cosa. Quizá yerran el objetivo… Creo que esto está llegando a un callejón sin salida. No soy capaz de encontrar ningún argumento con el que justificar la violencia a la que están sometiendo los poderes públicos a la sociedad.
El gobierno actual habla de mala gestión del anterior gobierno… Bien, puede que no se gestionara todo lo bien que se debiera. No obstante, la crisis económica ha venido dada por el empeño de las oligarquías económicas en mantener un sistema productivo caduco. El gobierno anterior, igual que este, no responden al interés común, sino que están al servicio de esa misma oligarquía. Solo así se explica que, mientras suben impuestos a la ciudadanía y precarizan aún más sus condiciones laborales, se apruebe una amnistía fiscal para aquellos que se llevaron el dinero fraudulentamente. Solo así se explica que mientras que desprotegen al trabajador, piensen en endurecer las leyes a quienes se rebelen contra esta infamia. No pienso condenar los hechos de Barcelona. Todo lo contrario. Ojalá ardan bancos, ojalá tomemos el ejemplo de Grecia. Ojalá mañana mismo tenga la ocasión de fotografiar ese fuego purificador que les haga perder a esos oligarcas y a esos mercados sin rostro ni humanidad, todo lo que estamos perdiendo nosotros. Y aún así, no será nada comparada con tanta desgracia, desahucios, presiones, desesperación, represión, palos, hambre y miseria."
Y esto me lleva a la cuestión:
¿Es la violencia justificable en algún caso? Para cualquiera con dos dedos de frente, sí, lo es. Pero desde el hombre de Neandertal que tenemos casi cuatro dedos de frente y hasta éste homínido parece que era más civilizado.
Es importante cuando una persona quiere impactar repetir muchas veces una palabra que suene a "palabro de los malos" (al cual dedicaré una entrada el día más insospechado), en este caso, oligarquía.
Una oligarquía no es más que el gobierno de unos pocos, y en el texto hace referencia a los bancos y "los mercados" que por lo visto nos dominan, en vez de dominarnos el autor del blog, sus camaradas, o un sistema de todos contra todos en base a la fuerza que tengamos, como sugiere su artículo. El texto condena tres hechos fundamentalmente:
-El primero y más relevante en mi opinión, la aprobación de la amnistía fiscal:
Yo también estoy en contra, y vaya si lo estoy, que nadie que defraude, robe y no cumpla quede impune. De modo que poco puedo añadir aquí, estamos de acuerdo.
-El segundo, el endurecimiento a las penas por desorden público, y todo lo que conlleva no ser de su lucha, la violencia,extorsión,destrucción de la propiedad,etc...
El texto lo justifica, es decir, el fin, siempre que nos guste; justifica los medios. Resulta que cuando la policía machaca a palos a un manifestante es un claro acto de violencia extrema, sin embargo, si una persona prende fuego y trata de destruir la bolsa de Barcelona a pedradas es lícito y justificable ¿por qué? por el poder de los medios.
Hoy por hoy algunos creen que los medios son la prensa en televisión,radio,papel o internet pero ya no, ahora son los líderes de opinión, los que más gritan en las redes sociales, al viejo ritmo (viejo porque ya se trató en su momento y no voy a ponerme nostálgico con el tema) de TODOS somos IGUAL de DIFERENTES. En los bancos, las bolsas, y en otros negocios "de los malos"(y lo subrayo para añadir que no son organizaciones caritativas) trabaja gente de a pie, con sueldos que rondan los 800€, cuyas horas extras no se pagan y a los que han accedido tras 5 años de carrera, pero esos no cuentan, no están en la lucha y destruir sus puestos de trabajo y amenazar sus libertades y condenarlos a cito textualmente "desgracia, desahucios, presiones, desesperación, represión, palos, hambre y miseria" es irrelevante porque no son suficientes, y de repente las minorías desaparecen del discurso.
-El tercer hecho que se condena es el sufrimiento de los ciudadanos (salvo claro está, el de los trabajadores de los negocios malos).
Vamos a quitar de los ocho problemas que se mencionan los que son gilipolleces, a saber: desgracia, desesperación, hambre y miseria. Los elimino porque o son estupideces sensacionalistas o basura para discursos sin contenidos. Y habiendo reducido los asuntos a la mitad, tratémoslos con la delicadeza que requieren tales problemas:
-Desahucios: Siento no contar con un diccionario legislativo, pero la RAE lo define como:
Dicho de un dueño o arrendador: Despedir al inquilino o arrendatario mediante una acción legal
Es decir, que cuando un inquilino no paga sus deudas, ha de ser expulsado de la propiedad, ya sea por alquiler o por hipoteca. Al principio del análisis de su texto el autor ha comentado su opinión, coincidiendo con la mía, en que amnistía fiscal cero, todo el que defraude y robe tiene que pagarlo, de repente sólo deben pagar los que él, con su juicio soberano, ha elegido y por los motivos que ha decidido.
-Represiones y en relación y más grave, palos:
Las represiones que sufre un ciudadano medio, hoy por hoy, no son escasas, te reprimen si no haces huelga, te reprimen si crees en el funcionamiento del sistema, te reprimen si propones alternativas económicas viables, te reprimen si defiendes valores distintos a los mayoritarios, te reprimen si te cortan la calle, te reprimen si bloquean tu negocio, te reprimen si te impiden trabajar, te reprimen si te impiden estudiar, te reprimen si te impiden consumir, pero no creo que el autor hable de eso, creo que se refiere a que la policía nos les permite reprimir al resto de ciudadanos y que llegado cierto punto, lo hace a palos. Por otro lado, los palos que reciben a cambio ellos sí se justifican, como se justifica tomarla contra negocios de cualquier tipo.
-Presiones
La gente sufre presiones de todo tipo también, insultos, bloqueos, piquetes, amenazas, extorsiones, negación de derechos, exigencias de privilegios ajenos, pero como el autor no se refiere a empresarios , no hablaremos de ellas. Hablaremos de las otras presiones, las que impiden hacer huelg...no, a ver, las que no permiten a los sindicatos convo...no, esa tampoco, la que expulsa a los inquilinos que no paguen su mens....joder que mal voy, ah! vale tengo una! la que obliga a un empleado a abandonar su empleo si falta el 25% del tiempo, por ejemplo, la que le permite interrumpir al país con total impunidad pero teniendo que solicitarlo claro, la que hace de los empleados estar solo un poquito por encima de su empleador en vez de absolutamente, al inquilino por encima de su arrendador, al trabajador por encima del empresario, y en resumen al tranquilo por encima del arriesgado.
Por lo que parece el mundo gira como siempre, hay cosas que están bien y cosas que están mal, y algún que otro tono gris de por medio. Por un lado están los malos, pagan más impuestos, tienen menos derechos, arriesgan más su dinero, trabajan todos los días, soportan más responsabilidades y claro, como es lógico, les odiamos porque salvo el brutal porcentaje que se arruina, ganan más dinero. Por otro lado están los buenos, no tienen por qué pagar sus deudas, pueden ejercer la violencia con impunidad, practicar extorsiones y amenazas sin reproche y por supuesto, como es normal, son héroes porque sin esos valientes, no tendríamos ni los derechos ni las libertades con las que hoy contamos.
Un especial saludo a todos los librepensadores, porque aunque sus padres, sus amigos, sus profesores, los conocidos, los blogs que siguen, los periódicos que leen, la radio que escuchan y los canales que siguen digan lo mismo, siempre están a tiempo de decirles a los "borregos" como pensar diferente.
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